Los portabebés ayudan al establecimiento de la lactancia materna y al mantenimiento de la misma.
El pecho funciona cuando lo damos a demanda. Eso se debe a dos aspectos:
- El pecho funciona de una forma compleja, pero a la vez muy simple: Produce más cuanto más lo vacian.
- La cantidad que un lactante necesita mamar varía de una toma a otra. Y se va modificando conforme el niño crece. La mejor forma de que lo que el pecho produce se amolde a lo que el niño necesita es que pueda tomarlo a demanda. Cada vez que lo pida y durante el tiempo que quiera. Si lo hacemos así, reducimos la ansiedad del niño comiendo, los gases… Y favorecemos que el niño tenga una relación con la comida en la que aprende a regular su apetito poco a poco por sí mismo.
Durante los primeros meses esa demanda puede ser tan intensa que dificulta a la madre hacer casi cualquier otra cosa. En esas condiciones un portabebés puede ser una gran ayuda. Ya que permite dar el pecho al niño mientras la madre se mueve y tiene las manos libres para hacer otras actividades. Y permite además dar el pecho en lugares en los que no se dispone de intimidad con total discrección.
Pero para hacer esto, no todos los portabebés son iguales ni permiten por ejemplo dar el pecho cómodamente dejando libres las manos. Y no todas las mochilas portabebés son adecuadas para todas las edades.
Si tienes claro que necesitas una mochila portabebé pero no sabes cual escoger te aconsejo que visites esta página en la que una madre experta en porteo te asesora para escoger tu mejor opción: