Pediatra online desde Granada
Jesus Garrido Garcia.
Pediatra privado en Granada
Nací en Guadix (Granada, España) en 1971.
Hice la carrera de Medicina en la Universidad de Granada (1989-1995).
El MIR para ser Pediatra en el Hospital San Cecilio de Granada (1997-2001).
Desde entonces he ejercido como Pediatra (tanto en atención primaria como en Hospitales) en Servicios de Salud Públicos, de Compañías Privadas y como Profesional independiente.
Me siento muy afortunado de dedicarme a esta especialidad. Cuando hablo con médicos en formación y me preguntan sobre ella digo que en mi caso es cierto algo que muy poca gente puede decir: «Todos los días me río en mi trabajo.»
Siendo Pediatra, trabajar con niños es al mismo tiempo una gozada y una gran responsabilidad.
Soy consciente de que no estoy arreglando coches o relojes. Los padres, cuando entran por la puerta, lo hacen para poner en mis manos lo más preciado que tienen en este mundo. Como cualquiera, puedo equivocarme. Pero espero que cuando esto ocurra no sea por haber tomado a la ligera mi trabajo o haberlo hecho con desinterés.
¿Porqué El Puericultor, si soy Pediatra? ¿Qué es para mi la Puericultura?
En España un Pediatra es un médico que tras acabar la carrera se presenta a una oposición en la que todos los médicos sin especialidad compiten por obtener una plaza para formarse en la que desean ejercer. Es el MIR.
Pediatría es una de esas especialidades. Si obtienes la plaza pasarás 4 años en un servicio de pediatría aprendiendo las distintas ramas de la misma y al terminar tu formación te darán el Título.
En España, para los Pediatras, un Puericultor es alguien que ejerce la pediatría sin tener esa formación. Hay un título de Puericultura que se puede obtener tras unos meses de formación. Pero también hay médicos generales que se denominan puericultores por dedicarse a atender niños.
Conozco muchos Puericultores que tratan a los niños mejor que algunos Pediatras vía MIR. Lo que sí es cierto es que habrían tenido una formación más completa si hubieran pasado por el MIR y no lo han hecho, y eso siempre será una carencia.
¿Porqué entonces El Puericultor si yo soy Pediatra?
La razón es que echo de menos algo de arte en la ciencia: Hay problemas de salud de los niños que no pueden afrontarse con protocolos basados en la evidencia científica. Y de hecho son a mi parecer problemas que influyen mucho más en la salud física y emocional del niño a largo plazo que muchos de los tratados con protocolos científicos.
Pero muchos Pediatras han renunciado a tratar estos problemas porque no tienen una forma científicamente demostrada de afrontarlos y más frecuentemente, porque precisan un recurso del que no disponen: Tiempo.
La Pediatría es una medicina con intermediarios (los padres) que precisa de mucha capacidad de comunicación por parte del Pediatra, una capacidad que no es ciencia sino arte. No para «torear» a los padres, sino par deducir cual es el enfoque que puede hacer que esos padres concretos afronten de la manera más adecuada el problema de salud de su hijo.
Algunos Pediatras actúan como ordenadores científicos. El diagnóstico es A y a él corresponde el tratamiento B. Ahí acaba su trabajo. No tienen tiempo para más, y resuelven de forma impecable la enfermedad del niño. Eso sería ideal si no hablásemos de enfermedades en personas (si fuesen averías mecánicas). Y más concretamente de personas que no tienen capacidad de decidir por sí mismas, lo que hace que la responsabilidad sobre lo que le pase recaiga sobre alguien que además, quiere por encima de todo a esa personilla (sus padres).
Cuando introducimos esos condicionantes, un perfecto diagnóstico con un tratamiento perfecto, pasa a ser una solución claramente insuficiente.
Por eso siendo Pediatra, quiero merecer el apelativo de El Puericultor.
He dado un paso atrás. Conozco los protocolos, pero creo que la diferencia entre un Pediatra y un buen Pediatra está en que cualquier especialista debe conocer los protocolos. El buen Pediatra es el que, además, busca la mejor forma de tratar a aquel cuyos problemas no se solucionan con el protocolo. O que usando el protocolo, busca la mejor forma de aplicarlo en cada caso concreto.