En el libro Bebés sin cólicos abordo un problema que hace llorar a millones de niños cada año durante sus primeros meses de vida.
El primer paso es entender de qué hablamos.
La última definición científica la encontramos en los criterios de Roma IV de 2016:
- Crisis de llanto inconsolable en los primeros 5 meses de vida, entre las cuales el niño está bien, de origen abdominal.
- Sin signos de enfermedad.
- Tienden a ceder de forma espontánea.
Para mí no existe nada que corresponda a esta definición de Cólico del Lactante
Es una definición que dice muy poco. No hay etiología (causa) ni fisiopatología (mecanismos), ni diagnóstico…
Sólo un cajón de sastre en el que se agrupan niños cuyo llanto cumple unos criterios comunes y no se es capaz de diagnosticar.
Mi objetivo desde hace 10 años ha sido sacar a los niños de ese cajón de sastre identificando problemas reales, conocidos en Pediatría que cumplen esos criterios menos uno: “Sin signos de enfermedad conocida”. Porque en mi experiencia, todo niño que llora con las características descritas tiene una o varias enfermedades o problemas que son identificables y tratables.
En este libro lo que he hecho es repasar todos los fallos adaptativos que se producen en los primeros meses de vida y pueden causar un llanto de estas características.
Entendiendo estos desajustes podemos intervenir para reequilibrarlos.
Ojalá esta definición acabe siendo eliminada y llegue el día en que ningún niño sea diagnosticado de Cólico del Lactante, porque como profesional no es otra cosa que el reconocimiento de un fracaso diagnóstico cuando los padres de un niño que sufre acuden buscando nuestra ayuda.
No considero mi trabajo cerrado, por lo que toda aportación que pueda mejorarlo será bienvenida.