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Fiebre y Vacunas en Niños

 Fiebre tras la vacuna del bebé

Fiebre y Vacunas: 2 Preguntas básicas en bebés ¿Qué hacer si empieza con fiebre y tocaba ponerle una vacuna? ¿Qué hacer si aparece fiebre después de vacunar?

Todos sabemos que el efecto secundario más llamativo tras administrar una vacuna a un niño o bebé es la fiebre.

Son muchas las preguntas que recibo en la consulta sobre esto. Las más habituales, a las que voy a dar respuesta en este artículo son:

  • Si toca ponerle una vacuna y empieza con fiebre, ¿qué hago?
  • Si tras ponerle una vacuna tiene fiebre, ¿cómo puedo saber si es de la vacuna o puede ser por otro motivo?
  • ¿Cuándo debería usar medicación para bajar la fiebre si aparece tras una vacuna?
  • ¿Darle medicamentos para bajar la fiebre no hará menos efectiva la vacunación?
  • ¿Cuándo es necesario que acuda al médico si aparece fiebre tras una vacuna?

Vamos una por una:

Si toca ponerle una vacuna y empieza con fiebre, ¿qué hago?

Por un lado, la fiebre es habitualmente un signo de que nuestro sistema defensivo está luchando contra una infección. Yo suelo decir a los padres que la vacuna ayuda al sistema defensivo a prepararse para cuando un ataque ocurra. Pero lo que no es buena idea es «distraerlo» cuando está en plena faena.

Por eso, si un niño tiene signos evidentes de estar enfermo, y la fiebre es uno de ellos, debemos retrasar la vacunación hasta que esté bien y pase unos días sin fiebre.

La utilidad de este retraso es:

  • Permitir al sistema defensivo que se centre en la defensa contra lo que ahora está atacando al organismo. Tiempo habrá de entrenarlo más adelante para su defensa contra otras infecciones, pero la prioritaria es la que ya está sufriendo.
  • Hace más fácil seguir la evolución de la infección que sufre en este instante. Si por ejemplo la fiebre estaba bajando (con picos menos frecuentes y menos altos) es un signo de mejoría. Cuando esta tendencia se interrumpe y empiezan de nuevo a subir los picos de fiebre en frecuencia y altura es un signo de que hay una nueva infección o se está complicando la actual. Pero eso mismo puede ocurrir si vacunamos antes de que acabe la infección, lo que puede confundirnos. Por eso mejore esperar a que pase al menos 2-3 días con temperaturas por debajo de 37º antes de vacunar.
  • Retrasar las vacunas unos días o semanas no es un problema importante. Los calendarios vacunales tienen unas fechas que son orientativas y de hecho son diferentes en distintos países. Una desviación de unos pocos días no es importante y menos aún cuando está justificado, como es el caso del que hablamos.

Si tras ponerle una vacuna tiene fiebre, ¿cómo puedo saber si es de la vacuna o puede ser por otro motivo?

Nos pueden orientar varias cuestiones:

  • La vacuna en sí y el tiempo que tarda en aparecer la fiebre. La mayoría de las vacunas, si dan fiebre, suelen hacerlo en los dos días siguientes a la vacunación. Hay algunas excepciones, las de virus atenuados, como la Triple Vírica que suelen dar la reacción más intensa entre 7 y 14 días después de la vacunación. Si coincide en esas fechas puede ser la vacuna. Pero una fiebre por ejemplo un mes después de poner la vacuna podemos descartar que sea por ella.
  • Inflamación local en el punto donde se ha pinchado. La fiebre es una reacción general del organismo. Lo normal es que cuando aparece por algo que empezó en un punto concreto (donde le pincharon la vacuna), veamos en ese punto una reacción evidente. Si no hay inflamación, dolor en el sitio del pinchazo, es raro que la fiebre sea por la vacuna.
  • Otros síntomas que acompañen a la fiebre. La vacuna del sarampión puede dar granitos, la del rotavirus puede dar diarrea… Pero la mayoría de las vacunas no tienen gérmenes vivos (debilitados, pero vivos) como las mencionadas. En la mayoría de las vacunas no tiene sentido que aparezcan otros signos de enfermedad como mocos, tos, vómitos, diarrea…. Cuando esto ocurre hay que buscar otras causas.

¿Cuándo debería usar medicación para bajar la fiebre si aparece tras una vacuna? ¿Darle medicamentos para bajar la fiebre no hará menos efectiva la vacunación?

La fiebre es un mecanismo defensivo del organismo y con las vacunas pretendemos que aparezca una reacción. Que haya fiebre tras una vacuna es un signo de que efectivamente la vacuna está logrando el efecto que buscamos.

Pero las vacunas están diseñadas para obtener la inmunización sin que sea necesario llegar a desencadenar fiebre. Por lo tanto, la fiebre nos dice que la vacuna ha logrado un efecto algo superior al que buscamos.

Dar antitérmicos por norma con las vacunas puede llevar a que en muchos casos no sean efectivas. Pero darlo cuando la fiebre supera los 38º sólo reduce el efecto excesivo de esa vacuna a un nivel normal. No estamos por tanto restando efectividad a la vacunación. Estamos evitando un efecto superior al necesario e indeseable por el malestar que produce.

Si tiene más de 38º o está muy molesto hay medicación para aliviarle. Mi consejo es que la uses.

¿Cuándo es necesario que acuda al médico si aparece fiebre tras una vacuna?

La gente suele guiarse mucho por lo alta o baja que sea la fiebre para preocuparse. Yo suelo insistir en que la fiebre es algo orientativo, pero lo esencial es el estado general. Si un niño tras vacunarse presenta fiebre yo recomiendo que acuda al médico siempre que:

  • Tenga mal estado general. Sea una reacción excesiva de la vacuna o una infección que ha coincidido, que un niño tenga de verdad mal estado general es motivo más que justificado para que sea valorado lo antes posible por un médico.

Situaciones que pueden esperar:

  • Fiebre alta pero acompañada de buen estado general. Si el niño está contento y juguetón con 40º, no me preocupa demasiado la causa. En principio no es urgente.
  • Síntomas que no sabemos si son o no por la vacuna pero son llevaderos. Un poco de diarrea, náuseas leves, un vómito aislado, una erupción en la piel, dolor localizado en el pinchazo… Mientas el estado general sea bueno no precisan una valoración inmediata, y de hecho se resuelven sin hacer nada en la mayoría de los casos.

Pero mal estado general, decaimiento intenso… Aunque no vayan acompañados de nada más, acude a tu pediatra o a urgencias lo antes posible.